Quito, 31 de julio de 2025 — Ecuador atraviesa uno de los momentos más críticos de su historia reciente en materia de seguridad nacional. Según cifras oficiales del Ministerio del Interior y reportes de organizaciones independientes, en los primeros seis meses de 2025 se han registrado más de 5.000 homicidios a nivel nacional, un aumento alarmante respecto al mismo periodo del año anterior. Lo más preocupante: una creciente ola de masacres en comunidades rurales, atribuidas en su mayoría a disputas entre bandas del crimen organizado.
📉 El país más violento del Pacífico sur
Ecuador, que hace apenas una década era considerado uno de los países más seguros de Sudamérica, se ha transformado en un escenario de guerra silenciosa. Las provincias más afectadas por la violencia son Guayas, Esmeraldas, Manabí, Los Ríos y El Oro, zonas estratégicas para el narcotráfico transnacional, que disputan el control de rutas, puertos y centros logísticos.
En lo que va del año, se han registrado al menos 15 masacres (asesinatos múltiples), varias de ellas perpetradas en espacios públicos como bares, escuelas o incluso durante celebraciones populares. El caso más reciente ocurrió el pasado domingo en El Empalme (Guayas), donde un grupo armado asesinó a 17 personas durante una fiesta parroquial. Entre las víctimas había un adolescente y varios adultos que no tenían vínculos aparentes con bandas.
🔍 Causas de la violencia: crimen organizado y ausencia estatal
Analistas de seguridad señalan que el auge de la violencia está directamente relacionado con el fortalecimiento de grupos criminales como Los Lobos, Los Choneros y células aliadas al cartel mexicano Jalisco Nueva Generación. Estos grupos han expandido su control territorial, reclutado jóvenes en situación de vulnerabilidad, y penetrado incluso algunas estructuras estatales.
La falta de presencia policial en zonas rurales, la crisis carcelaria sin resolver, y la corrupción institucional han contribuido a un escenario donde el Estado ha perdido el control sobre partes del territorio nacional.
“Hoy Ecuador vive una situación de inseguridad comparable a la de países en conflicto. Las estructuras criminales están mejor armadas que muchas unidades policiales y operan con total impunidad”, advirtió Luis Córdova, experto en violencia y crimen organizado.
🛑 Reacción del gobierno: estado de excepción y deportaciones masivas
El presidente Daniel Noboa ha declarado en varias zonas un nuevo estado de excepción, y ha intensificado las operaciones militares en las provincias costeras. Asimismo, el Ejecutivo activó el plan de deportación masiva de presos extranjeros, comenzando con más de 600 ciudadanos colombianos, lo que ha generado controversia a nivel internacional.
El ministro de Gobierno, Mónica Palencia, afirmó que el país “está librando una guerra contra el narcotráfico” y que se requerirá “mano dura” para restaurar la paz. Sin embargo, diversos sectores sociales critican la falta de un plan integral que incluya prevención, inclusión social y justicia efectiva.
📊 Cifras que estremecen
- 5.025 homicidios en los primeros seis meses de 2025.
- 80 % de las muertes están relacionadas con violencia criminal y ajustes de cuentas.
- Más de 350 menores de edad asesinados en lo que va del año.
- 10 masacres confirmadas entre abril y julio, la mayoría en zonas rurales de Guayas y Esmeraldas.
- 17.000 personas desplazadas internamente por amenazas del crimen organizado.
📢 Llamados urgentes
Diversas ONGs, colectivos ciudadanos y la Defensoría del Pueblo han pedido al gobierno un diálogo nacional por la seguridad, con participación de comunidades, académicos, organizaciones sociales y la cooperación internacional.
“No se puede combatir la violencia únicamente con balas. Se requiere reconstruir el tejido social, fortalecer la justicia, desmilitarizar los barrios y devolver la esperanza a los jóvenes”, expresó María Fernanda Muñoz, representante de la Red por la Paz.