Un reciente estudio científico ha encendido las alarmas sobre los impactos graves que los perros domésticos están causando en la fauna nativa de los Andes ecuatorianos. La investigación documentó 11 casos de persecución, ataques y muertes de vertebrados nativos, incluyendo especies vulnerables como el lobo de páramo y especies en peligro de extinción como el cóndor andino, el tapir de montaña y la cervicabra.
De estos casos, ocho ocurrieron dentro de áreas protegidas y tres en zonas transformadas por humanos cercanas a estos ecosistemas frágiles, demostrando que la falta de control de perros representa una amenaza real incluso en zonas supuestamente seguras. Además, en dos tapires atacados, se detectaron bacterias resistentes a antibióticos, lo que eleva el riesgo de transmisión de enfermedades hacia la fauna silvestre, agravando la crisis de conservación en los Andes.
Los investigadores llaman a la acción urgente de autoridades ambientales, academia, ONGs, grupos de bienestar animal y sociedad civil para implementar medidas que frenen esta amenaza: entre ellas, campañas de educación, vacunación, esterilización y control responsable de perros domésticos en zonas rurales y cercanas a áreas protegidas.
Conclusión
Los perros domésticos no controlados están contribuyendo silenciosamente a la extinción de especies emblemáticas de los Andes ecuatorianos. Actuar ahora es clave para proteger a la fauna en peligro de extinción y evitar pérdidas irreversibles para la biodiversidad del país.